Seguro que has tenido un esguince de tobillo alguna vez. Es una de las lesiones más comunes entre deportistas y personas que no lo son, pero alrededor de él existen muchas dudas sobre cómo debe tratarse y cuál es el mejor proceso para su recuperación. 

Un esguince de tobillo es una lesión de alguno de los ligamentos que forman la articulación del tobillo, el que más frecuentemente se afecta, situado en la parte externa, es el Ligamento Lateral Externo (LLE). 

La lesión de este ligamento suele producirse por un movimiento brusco en inversión o supinación del pie (punta de los dedos hacia dentro) o bien por un mal apoyo mantenido en el tiempo. 

Grados de esguince de tobillo

En función de la gravedad de la lesión se distinguen 3 grados de esguinces, de menor a mayor gravedad.

• Grado 1: Sobre estiramiento del ligamento sin rotura de fibras.
• Grado 2: Rotura parcial de algunas fibras del ligamento.
• Grado 3: Rotura completa de todas las fibras del ligamento.
• Síntomas

Los signos y síntomas de un esguince, serán por tanto muy variados en función del grado ante el que nos encontremos. Así, los síntomas más frecuentes suelen ser:

• Dolor, en especial cuando soportas el peso sobre el pie afectado
• Dolor ligero al tocar el tobillo
• Hinchazón
• Hematomas
• Amplitud de movimiento limitada
• Inestabilidad en el tobillo
• Sonido o sensación de chasquido al momento de la lesión

Lo principal, en este caso, será acudir al personal sanitario para evaluar la lesión, identificarla y si fuera oportuno, realizar las pruebas complementarias que fueran necesarias.

El dolor e hinchazón, a menudo no son evidencias de mayor gravedad, pero sí mantendremos especial atención ante la incapacidad para apoyar el pie, presencia de hematoma y sensación de chasquido en el movimiento que produce la lesión.

Tratamiento y tiempo de recuperación de esguince de tobillo

El tratamiento de nuestro esguince de tobillo y el tiempo de recuperación variarán según el grado del mismo, de ahí volvemos a repetir la importancia de una correcta evaluación. 

• En la actualidad, las últimas investigaciones han demostrado que no son necesarios grandes periodos de inmovilización y reposo si se realiza el tratamiento adecuado.  
• El movimiento mejora y acorta plazos en la recuperación, recuperando antes el tobillo y previniendo problemas posteriores, si bien es cierto, en algunas ocasiones y dependiendo de la lesión, un periodo de reposo mayor será necesario.
• Si queremos ser efectivos, es fundamental un tratamiento global. Vamos a dedicarle tiempo a la articulación del tobillo que se ha lesionado, pero al mismo tiempo, es importante buscar y corregir las pequeñas disfunciones o restricciones de movilidad que vayamos encontrando a nivel del pie, rodilla, cadera, articulaciones sacro-iliacas y pelvis o incluso la columna lumbar. 

El cuerpo, debe ser entendido como un todo, en el que el exceso de movilidad o la falta de ésta en algunos segmentos, va a repercutir en un peor funcionamiento de todo el cuerpo en general y de las zonas vecinas en particular.

Caso clínico

A continuación, en la imagen podéis ver el tratamiento que recinbe un paciente con esguince de tobillo en nuestra clínica. Vino con un vendaje realizado en urgencias sin poder apoyar el pie por el dolor. Nosotros se lo quitamos y realizamos técnicas de terapia manual, punción seca y un vendaje funcional. Cuando terminamos la sesión, el paciente caminaba perfectamente. 

Algunos mitos y mentiras sobre cómo debe tratarse y cuál es el mejor proceso para la recuperación de un esguince de tobillo:

• No recibir tratamiento hasta que pasen al menos 10 días
• Lo mejor es la inmovilización total con férula
• Los primeros días guardar reposo y no pisar
• Meter el pie en agua caliente con son sal y vinagre

Si tienes un esguince debes saber que debes tratarlo desde el primer día de la lesión, es muy importante el tratamiento precoz para el éxito de la recuperación.Te recomendamos que te pongas en contacto con nosotros para recuperar la movilidad de los tejidos, disminuir la inflamación y reducir el dolor, al tiempo que corregimos las pequeñas disfunciones y desequilibrios que vienen asociados al esguince, tanto a nivel local de la articulación como a nivel distal.